jueves, 4 de septiembre de 2008

Decepciones.

Es difícil esto de tener amigos, no?
Decepciones, insatifacciones, inconsecuencias...
Justo cuando te das cuenta que encuentras a alguien excepcional, todo se viene abajo. Lo peor, es que te hechan la culpa a ti, como si tú, al no dar la respuesta que necesitan, haces mal. Acaso la verdad no es la que debe ir primero? Eso no lo entiendo.

Ahora, solos en la oscuridad, miramos al alrededor como si nunca nada hubiese pasado, pero aún sintiendo aquel olor a alegría, cervezas y cigarrillos de esos días fantasmas. Los pensamientos del estilo 'qué hubiera sido si...' inundan nuestras mentes como una represa quebrada ante la presión de tan grande volumen de h2O.

Pero yo estoy tranquilo. Nunca hice nada malo y siempre añoré por lo mejor. Tal vez fui inocente e ingenuo al pensar que todo podría volver a ser como antes, y pequé. Pequé de ingenuo, pero no me arrepiento. El positivismo de la vida es algo que nadie me podrá quitar y que le da un poco más de incertumbre a la vida tan monótona que podemos llegar a vivir. Eso sí, me juega un poco en contra, ya que al ver la vida de tantos colores, no nos damos cuenta de la cantidad de tonalidades grises que existen escondidas entre la superficialidad del arcoiris.


No sé. Difícil de creer. Soy de esas personas que entregan todo en una relación co-operativa y no piensan en las consecuencias que podría producir un quiebre tan rotundo como el que tuve que soportar. En realidad, si uno anduviera preocupado de aquello, no se arriesgaría a tomar cualquier tipo de vulnerabilidad, no creen?
En fin. Tengo miedo que de la coraza autoprotectora se vaya haciendo más gruesa y no se pueda ver el verdadero yo.
Así que por favor, no me fallen.

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